viernes, 28 de febrero de 2014
Sala De Espera (Artículo)
¡Qué difícil es esperar! no importan los esfuerzos que hagan para embellecer y acomodar el ambiente, la decoración, dentro de uno hay una angustia, una lucha de intereses! Siempre que haya que esperar, el YO se querrá revelar. Algo parecido pasa mientras esperas en Dios, quisieras tener la fórmula para que el tiempo se acelera y sea cumplido su propósito en tu vida, pero sabes, te equivocas, por más esfuerzo que hagas, por más impaciente que te pongas, todo depende de Él y su voluntad.
Angustia, incertidumbre, impaciencia, dolor, desesperación, decepción, enojo, tristezas, lágrimas, etc, son algunos de los sentimientos que nos albergan cuando esperamos, se nos olvidan las promesas, las bondades del Señor, el bien y la misericordia que te acompañaran todos los días de tu vida, ¡desaparecen de nuestra mente! todo porque nos tenemos que someter a un proceso de espera.
Te has preguntado alguna vez ¿Cómo esperar en Dios? ¡Yo también! Y sé que no hay una fórmula “mágica”, pero si hay una manera, y la encontramos en el Salmo 40:1 y dice: “Pacientemente esperé a Jehová, Y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso.” [Seguir Leyendo]
Angustia, incertidumbre, impaciencia, dolor, desesperación, decepción, enojo, tristezas, lágrimas, etc, son algunos de los sentimientos que nos albergan cuando esperamos, se nos olvidan las promesas, las bondades del Señor, el bien y la misericordia que te acompañaran todos los días de tu vida, ¡desaparecen de nuestra mente! todo porque nos tenemos que someter a un proceso de espera.
Te has preguntado alguna vez ¿Cómo esperar en Dios? ¡Yo también! Y sé que no hay una fórmula “mágica”, pero si hay una manera, y la encontramos en el Salmo 40:1 y dice: “Pacientemente esperé a Jehová, Y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso.” [Seguir Leyendo]
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario